GRAFITIS SÍ, GRAFITIS NO: ARTE VS. VANDALISMO
El “delito” contra la propiedad privada es el que más importa y también el más criminalizado. En Olavarría, si pintás una pared estás al horno. Aunque el daño que supuestamente ocasiona esto es solo un poco de pintura en la pared, muchas veces incomoda por su contenido o simplemente por su atrevimiento de no respetar la fachada. Sin embargo, de la contaminación visual de los carteles y pantallas colocados en el espacio urbano, del cemento que nos asfixia, así como de los carteles prometedores que abundan en la ciudad durante las campañas políticas NO se habla. En otras ciudades tal vez ya está más instalado el arte urbano. De todos modos, el robo, que también es considerado un delito sobre la propiedad privada, es más criminalizado por el Estado, por sus instituciones y por la sociedad, que los delitos contra otra persona. Si sos un policía asesino, un violador, o un macho violento no pasa nada, gozás de impunidad. Si grafiteás, posiblemente te comas varios días en cana o tengas que pagar una multa, acrecentada en los últimos días, que puede llegar a costar 60.000 pesos.
Por esto y mucho más, reivindicamos la célebre frase de Rodolfo Walsh: “Las paredes son la imprenta del pueblo”. Consideramos, entonces, que las paredes del espacio público como soporte son una de las pocas alternativas de comunicación que tenemos. Por lo tanto, se han convertido en un terreno de disputa, y lo seguiremos utilizando. Defendemos nuestro derecho a la libertad de expresión, y seguiremos pintando para difundir nuestras luchas y nuestros deseos en la calle.
Por Luz Jara (fragmento). Nota publicada en la Revista Madre Tierra, editada por la Sal Editora.
Fuente: www.miradasdelcentro.com.ar/home/graffitis-si-graffitis-no-arte-vs-vandalismo/